Si
bien el sistema ABS es útil en casi todas las situaciones, resulta
indispensable en superficies deslizantes, como son pavimentos mojados
o con hielo, ya que en estos casos la diferencia entre el coeficiente
de rozamiento estático y el dinámico es especialmente alto.
Cuando
se conduce sobre nieve o gravilla y se frena sin sistema ABS, se
produce el hundimiento de las ruedas en el terreno, lo que produce
una detención del coche más eficaz. El sistema ABS, al evitar que
se produzca deslizamiento sobre el suelo también evita que se hundan
las ruedas, por lo que en estos tipos de superficie, y deseando una
distancia de frenado lo más corta posible sería deseable poder
desactivar la acción del ABS.
Algunos
sistemas usados en autos deportivos o de desempeño, permiten al
sistema del vehículo desactivar el uso del ABS para producir una
frenada más brusca al principio y permitir el control del mismo con
una velocidad más baja. Es decir el sistema antibloqueo entra a
trabajar con retraso, permitiendo derrapes controlados o
enterramientos en terrenos blandos.